El 2022 se inicia con alza de 13% en creación de firmas y se prevé moderación para el año
La pandemia generó que cientos de miles de personas perdieran su fuente laboral. En su peor momento, la crisis económica destruyó 2 millones de plazas de trabajo. Sin embargo, a medida que las ciudades se fueron abriendo y la movilidad se recuperó, el empleo comenzó a crecer, pero con un fuerte componente de autoempleo, el que se puede asociar en parte al desarrollo de emprendimientos o la creación de mipymes.
A diciembre de este año, este tipo de puestos de trabajo creció 16% en 12 meses, según datos del INE. Esto está por sobre el crecimiento de la ocupación total, que aumentó 8% en el mismo período de tiempo.
En paralelo, de acuerdo a datos del Ministerio de Economía, 198 mil empresas se crearon en 2021, marcando un alza de 24,9 % respecto a 2020. En enero, por su parte, el número de nuevas firmas llegó a 12 mil, con un incremento de 13% respecto a diciembre y una caída de 10% en 12 meses. El ministro de Economía (s), Julio Pertuzé, señala que en períodos de crisis aumenta lo que es el emprendimiento por necesidad. “Es decir, aquellas personas que ya no tienen una fuente laboral fija recurren al emprendimiento como una forma de subsistencia. Esto toma sentido si se considera los casi 2 millones de empleos que la pandemia destruyó, por lo que es lógico que una importante cantidad de personas haya optado por este camino”, sostiene.
Josefina Henríquez, investigadora de CLAPES UC, proyecta para el año 2022, sumado a la incertidumbre política e institucional, además del fin de las transferencias fiscales, un menor crecimiento para la economía chilena, factor que jugaría en contra para la creación de empresas. “Además, dado que los años 2020 y 2021 hubo un aumento importante en la creación de empresas, las bases de comparación son muy exigentes para este año”, sostiene.
Pertuzé complementa: “Estamos observando una regresión ala media. Es decir, si contamos con un promedio, y observamos que en un período de tiempo se produce un aumento destacado, la estadística nos dicta que la tendencia volverá a las cifras históricamente registradas. Ahora bien, con lo alcanzado en enero de este año, si bien son cifras menores que las observadas durante el mismo mes del 2021, son un 25% superior a los datos obtenidos de 2020 hacia atrás”.
Por el lado del empleo, el economista sénior del Observatorio del Contexto Económico de la UDP, Juan Ortiz, explica que el dinamismo del empleo de cuenta propia se explica principalmente por el alza del empleo por cuenta propia informal, en los sectores de comercio y construcción, principalmente. “Estos sectores se han beneficiado del proceso de apertura económica a lo largo del año pasado”, plantea.
Así, Ortiz anticipa que con un crecimiento del PIB en torno al para 2022 la creación de empleo de calidad será baja, específicamente para el empleo asalariado privado formal, por lo que para este año es esperable una recomposición del tipo de empleo. “Así, la mayor creación será el empleo de cuenta propia, donde 2/3 corresponden a empleo de cuenta propia informal. Por lo tanto, en un contexto macroeconómico de desaceleración de la actividad, el empleo por cuenta propia mantendrá el impulso. El problema, no obstante, es que este tipo de empleo es de baja calidad”, señala.
Mientras que Henríquez señala que para el presente año es probable que se observe un menor crecimiento con respecto al año 2021, primeramente, por las exigentes bases de comparación, además de una disminución en el apoyo fiscal y una mayor incertidumbre.
Fuente: El Mercurio